Tras la Verdad
El esquirol del candidato al gobierno del Estado de Movimiento Ciudadano, terminó por enfermarse al darse cuenta de la burla de que fue objeto, cuando se enteró de la noticia de que ya no seguiría siendo candidato.
Sorprendieron al “títere” cuando le informaron que, vía conferencia de prensa se daría a conocer que pedirían a toda la militancia de MC, que no votara por él, vamos por el candidato de ese partido, que se convirtieran el instrumento útil y “regalaran” su voto a la derecha, a pesar de su ideología ser de izquierda.
Y así se dieron las cosas, en conferencia de prensa la dirigencia estatal de MC, en compañía del candidato del PAN al gobierno del Estado, anunciaron que “regalarían” 60 mil votos. Y ni tardo no perezoso Domínguez hizo la sumatoria y le arrojó la cantidad de 100 mil votos de militantes de otros partidos en su favor ¡Ah bueno! Y dijo ¡Ya gané! Pero…
Esos “virtuales” votantes hoy día no saben bien a bien por quién votar, excepto aquellos que entraron en la negociación de la repartición de posiciones en caso de lograr el triunfo. Sí, de eso se trata, de negociar posiciones que garanticen la prebenda de espacios políticos que garanticen “inmunidad”. De tal suerte que todo se trata, hasta ahora, de “contratos virtuales” no escritos y suscritos sin el consentimiento de aquellos que son dueños de su propia voluntad. Y la militancia realmente impresionada y sorprendida se queda viendo como juegan con ellos, como si se tratara de moneda de cambio sin que se les pregunte.
Habiendo consultado a varios militantes de ese partido –MC- me expresaron su abierta inconformidad por lo que había realizado la dirigencia; que nadie los obligaría a votar por el candidato del PAN. Por supuesto, no quisieron comentarme o bien, confesarme, por quién votarían ante este radical cambio de candidato. Reconocieron que nunca estuvieron de acuerdo con el “fallido candidato”, mucho menos por la mediocre participación que desempeñó en los debates. Bueno, incluso se atrevieron a comentarme que dudaban si votarían por los candidatos de MC, ante lo que consideraron una traición a la militancia que nada pide a cambio, solo apoyar y defender a su partido.
Lo interesante de toda esta gama de “saltimbanquis políticos” es que, se confirma la regla de la inexistencia de ideologías y se demuestra el pragmatismo político por acceder al poder. No importa con quién ni como, mucho menos las ideas, los programas, las plataformas electorales; nada de eso es trascendente, lo que obsesiona es el arribo al poder. De ahí que hoy día las traiciones se den con toda “normalidad” siempre y cuando se pueda presumir que se accederá al goce del poder, no importa la vía, lo fundamental es conseguir la tan ansiada meta: el disfrute de la franquicia. Lo malo de todo esto, que nada garantiza el triunfo, mucho menos que esa ilusión de 60 mil electores “virtuales” voten mecánicamente por el candidato que se les ordene y no por el de su partido que fue literalmente desapareció de la escena política ¡Ya falta menos para el juicio final del electorado!
Danos tus comentarios