Afirmaba John “Black Jack” Pershing –por cierto, muy recordado allá por el Carrizalito, donde los carrancistas le infligieron una derrota infame durante la expedición punitiva contra Villa– que la Infantería gana batallas, pero la Intendencia ganaba guerras.

Cada día que pase sin que Morena defina candidatos, mucho más difícil le será obtener triunfos. Ya lo dijo Mario Delgado en El Marqués, Morena no se caracteriza por su disciplina y menos por la institucionalidad; pero en Querétaro abusan. Ahora resulta –parafraseando las palabras de la presidenta Rufina Benítez– que el nuevo “me jodí la rodilla” es que a las camionetas de las encuestas seguramente se les poncharon las llantas, y que si bien, les va llegan a Querétaro antes de abril.

Así la pobreza intelectual de quienes se atolizaron por las mañaneras para disfrazar eufemísticamente una derrota anunciada, pues nuevamente le aseguro –como en 2021– que no habrá representantes de casilla, brigadistas y gente que aporte al movimiento, sin contar que a ver qué imprenta les haga la publicidad.

Si la idea es que vendieron a la Cuatroté en Querétaro –no lo afirmo, pero tampoco lo niego por no ser hecho propio–, al parecer lo están haciendo muy bien, incluso a más de uno le puede alcanzar para su jubilación. ¿Verdad, Arturo?

Armando Rivera renunció por “motivos personales”, aunque no hay un papel, dice Alejandro Israel. Mire, amable lector, si yo hubiera sido engañado, digo, invitado para salir de mi casa para hacer campaña, poniendo mis propios recursos, prestigio, operadores y levantando un equipo en tiempo récord que, además, llegó a preocupar a más de uno y que luego resultara que no han definido siquiera el género y que además te lo comuniquen por teléfono tras una tómbola diciéndote que no pasa de los primeros días de abril, mi lacónico comunicado sería en los mismos términos y que renuncio por motivos personales.

Rivera no toma una decisión visceral, ya no es como antes; además, no la tomó solo, pues lo consultó con su familia y colaboradores cercanos. La decisión, eso sí, sorprendió a todos. El gobernador –dicen las malas lenguas– se enteró por el tuit de otro gordo, el de la “Pluma de Platino”, Alejandro Olvera, y hasta el coordinador del cuarto de guerra –ese por el rumbo de Plaza Boulevares– tampoco sabía nada, así como tampoco hoy nadie a ciencia exacta sabe cuál será el destino político de Armando, que anda fuera del país. ¿Si acaso seguirá en Morena? ¿Si se sumará nuevamente con el PAN? O muy por el contrario, tiene listo ya su Plan C, ¿acaso C de Chema Tapia?, es pregunta.

Como novia de rancho dejaron los perredistas a nuestra amiga la comunicadora Miriam Islas, pues ya que los panistas lograron bajar al exedil priista de Tequisquiapan, Antonio Macías, del Distrito I federal y así sustituir el género con la exedilesa también priista de Ezequiel Montes, Lucy Quintanar, no había ya impedimento para que el aún edil de Corregidora, el panista Roberto Sosa, fuera en el Distrito IV federal por todos los partidos de la alianza “Fuerza y Corazón por México”, siendo notificado Jair Miquel, del PRI, por su presidenta Abigail Arredondo de que siempre ya no iba. Pero en el caso de Miriam, ella se enteró por las columnas de los periódicos. Oficialmente aún no sabe nada, y menos los de la cúpula del “sol azteca” le contestan ya las llamadas y los mensajes de WhatsApp, pero créame que si se va a la Sala Toluca a impugnar la designación de Sosa, seguramente hasta regiduría le dan; las mujeres llevan mano, solo que muchos no entienden, pero si tiene alguna duda, pregúntele a la panista Mary García, de Huimilpan, cuando agarro de trapo al trapo Nava.

Sin las masas de otros tiempos, sin las extensas comitivas llenas de boato, se llevaron a cabo el fin de semana en las oficinas del PRI, que por primera vez no tuvo candidatos a todos los municipios –les faltó Peñamiller–, los registros de aspirantes a diputados el día sábado y de ediles el día domingo. Hubo sus excepciones; por ejemplo, si bien Felifer fue sumamente discreto y formal durante su registro, hubo mucho ánimo y alegría en los registros de Rene Mejía, de Amealco, y de Manuel Montes, de Colón, pero la tarde, sin duda, se la llevó definitivamente Miguel Martínez Peñaloza, de Cadereyta, pues mostró que sabe integrar lo mismo azules que tricolores y amarillos, convidando en un ágape muy concurrido al final del evento con una buena barbacoa de Boyé. Uno que otro priista incluso se preguntaba si al menos en el taco le había salido un hueso. Motivos no les faltan para celebrar, pues a falta de designación de candidatos en el partido guinda, saben que el tiempo juega a su favor; Luis Carlos Arellano es competitivo pero no es seguro que vaya; lo mismo ocurre en Colón, donde los morenos cada vez se ven más naranjas, y en Amealco, donde al igual que Querétaro, el Partido Verde pudiera ser en lo local la opción cuatroteísta.

Para el partido naranja, el gran reto para Nora Amaya y César Cadena es que el partido no se les desmorone en el último escalón, cuando ya lo más difícil lo han podido sortear. Tras la cesión de candidaturas federales, las miradas se concentran en los dictámenes locales, para poder finalmente conocer a los abanderados a las candidaturas de distritos y municipios. Pero no será tan sencillo, primeramente están los informes de actividades de precampaña. Sí, ya sé, algunos no hicieron y pues como que qué reportan. La otra, en las capitales la gente de Dante requiere encuestas de salida; por el momento, en Querétaro municipio, de mujeres, Paulina Aguado y la incansable Tere Calzada parecen llevar la delantera, mientras que en hombres serían Beto Escárcega y Juan Carlos Briz. En tanto, quizá los veamos por última vez juntos en el arranque de campaña –el sábado– del doctor Ramón Rivera en el Colegio Médico, programado a las 16:00 horas. Ahí veremos a otros muy dignos aspirantes como Jorge Luna, Víctor García, Marín del Campo o Mirian Loa, siendo para muchos su oportunidad de estrenar sus tenis fosfo fosfo, mientras que para más de alguno será la única oportunidad que tendrán de portar sus distintivos naranjas antes de que se destiñan por la ambición.

Cuando hace casi un año Samuel García, gobernador de FosfoLéon, anunció una inversión millonaria de Tesla, causó un amplio revuelo que hasta casi hace compadre a Elon Musk y parecía que no se quitaba la playera de Tesla ni para dormir, usando para ello toda la fuerza de su área de comunicación social del gobierno estatal. Tesla aparecía a nivel nacional hasta en la sopa; su propia candidatura fallida mucho se cimentó en esa supuesta inversión, inversión que por cierto no queda claro si se va a llevar a cabo.

Mientras tanto, comparativamente llama la atención la casi inadvertida inversión de Amazon en Querétaro, muy superior por mil millones de dólares –ahí nomás– a la del estado regio. Mauricio Kuri, muy a su estilo, serio, formal, sin aspavientos, sin hacer circo y maroma, demostró ser eficaz y eficiente, bien podría decirse que discreto; el huevo prácticamente no lo cacareó, dirían los clásicos, uno histórico sin precedente alguno.

Así como muchos compartimos la idea de que al secretario de Obras Públicas se le deben dar dos medallas –una por si la pierde–, a colaboradores cercanos de resultados como Marco del Prete –que se ve que además traen la playera de la administración bien puesta– se les debe reconocer ampliamente su mérito.

Se va del PRI Blanca Diana Martínez, igual que otros más del tricolor antes que ella. No me crea, pero el último que se vaya de ese partido que por favor apague la luz, porque ya ni don Carmelo (el velador) está ahí. Mire, le cuento.

A la regidora de Huimilpan la maltrataron, no le cumplieron los acuerdos, que no era otra cosa que una encuesta real, no una que nunca mostraron. El panista Jairo Morales –suplente de Toño Zapata y que lo registró el PRI como propio– le ofreció incluso cinco de las seis regidurías, pero no era tema de pactar, sino de cumplir acuerdos; menos, satisfacer complejos o paliar culpas (al menos Juan Guevara cumplió políticamente acompañando a Manuel Montes al registro, acá la ausencia de la regidora Blanca fue obvia y evidente).

Pronto sabremos si llega a abanderar otra opción, pues ella sí podría pelear a Juan Guzmán la presidencia municipal del beisbolista municipio de Huimilpan. No demerito a Jairo, aprendió de un buen maestro como el decano legislativo Toño Zapata; pero en política hay sumas que restan y sumas que también multiplican.

P.D.: Hay que reconocer que de los pocos grupos en Morena que aún les ilusiona ir al Zócalo a acompañar a Claudia, aunque no les den frutsi y torta, es el del buen Lole González. Ahí veremos a la aguerrida Rosy Grandinni.

Daniel 2:20-21

Él cambia los tiempos y las épocas, pone y depone Reyes. A los sabios da sabiduría, y a los inteligentes, discernimiento.

---