De todas las declaraciones que ha dado el Tlatoani del Centro Cívico, la más ofensiva y no menos irrisoria es la justificación que dio respecto a la publicidad política encontrada en las oficinas de su operador y amigo, Carlos Silva Reséndiz, al decirnos que el personal del municipio “organizaba” el material para llevarlo al relleno sanitario. ¡Qué dispendio de recursos para cuando de basura se habla!

¿Acaso la soberbia de Marcos le ha cegado al grado de no ver lo que todos los vimos? ¿Dónde están sus asesores? ¿Estela Valenzuela y Lorenzo Pegueros no son capaces de “sugerir” declaraciones menos absurdas al pequeño dictador? Surgen muchas preguntas, una particularmente indignante: ¿Marcos cree que el pueblo es “pendejo”?

Todos vimos y escuchamos el video que se transmitió en vivo, el cual no tiene edición alguna. Todos escuchamos cómo los empleados aceptan el contenido del material y los motivos por los que se encontraba ahí. Todos supimos cómo el eterno cómplice del presidente, Carlos Silva, trató de engañar a la fiscalía vaciando las oficinas después de que fue exhibido por no cumplir acuerdos a los autores del video que, según me cuentan, iban por su Navidad.

Como siempre, de consecuencias el pueblo poco puede esperar, pues el PAN, a pesar de deslindarse de los actos, no sancionará ni a Marcos ni a su cómplice, pues el compromiso económico (por cierto, pagado por todos los queretanos) que guardan Pepe Báez y Marcos es de varios millones de pesos en la nómina, solo busque a todos los Rojas en la plantilla laboral.

De la fiscalía poco o nada podemos esperar, pues no se está "judicializando" una sola carpeta de investigación, y del IEEQ solo se puede decir que es un árbitro “muy a modo”, solo hay que recordar que las instalaciones que guardan sus oficinas son propiedad de un tal Ricardo Anaya. ¿Le suena el nombre?

Sin duda alguna, la única opción de justicia para los ciudadanos será castigar al cártel de Marcos Aguilar en las urnas votando por una opción diferente al partido de quienes detentan el poder, pues en franca burla a la inteligencia colectiva, el Tlatoani dice estar arriba en las “encuestas” para cualquier cargo, particularmente en la reelección.
Si en un año de gobierno empeñó a Querétaro 15 años, imagine lo que haría en seis.

La última y nos vamos

Parece que la aspiración independiente de Luis Gabriel Osejo está molestando al “Aguilarato”, pues ya se soltó a la “jauría” para intentar desprestigiarlo con las mismas mañas de siempre, por cierto orquestadas por el protagonista del videoescándalo. No entiende, “lenguas podridas ni para los perros”.

Como siempre, la mejor opinión es la de usted. Y recuerde, no me crea a mí, créale a sus ojos.

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