Una vez más, desde el extranjero ponen en evidencia al gobierno de Andrés Manuel López Obrador, por mentirosos.

Resulta que “Pegasus” es una herramienta que ayuda, no es para “espiar”, aseguró el director de la empresa Citizen Lab, Ronald J. Deibert. Sin embargo, la FGR ha distorsionado la información a pesar de estar informada de cómo funciona el sistema para detectar malwares.

En el lenguaje digital se conoce al malware como un software diseñado para causarle daño a usted o a sus dispositivos. Incluye muchos tipos de programas, como spyware, ransomware, caballos troyanos, rootkits y muchos más. Se pueden expandir manualmente o automáticamente.

Dada la tergiversada información que han proporcionado autoridades de la 4T, resulta extraño que el gobierno de Enrique Peña Nieto haya dejado los contratos originales en los archivos del gobierno que hoy tiene en su poder López. Si hubiese sido un programa “espía” lo más lógico era haber destruido cualquier evidencia. Pero no, dejaron los contratos en los correspondientes archivos. La mala fe impera en el gobierno de AMLO.

Acorde al comentario del director de Citizen Lab, el contrato era para para verificar si los teléfonos celulares del “gallo” (así identificaban a AMLO) y su equipo de trabajo no estaban infectados por algún malware. Ronald J. Deibert desnuda la mentira, aunque solo se refiere a la Fiscalía General de la República, sin aludir a Gertz Manero, con quienes han tenido contacto y les han hecho saber cómo funciona Pegasus, dijo Ronald. Los detalles fueron publicados en Twitter. ¡Abierta confrontación!

Así la exhibida en Twitter: “En múltiples ocasiones aportamos extensa documentación escrita –así como explicaciones orales en persona a representantes de la Fiscalía– que documentaron la escala de los ataques en contra de la sociedad civil mexicana”.

“Adicionalmente hemos explicado a la Fiscalía cómo puede perseguir líneas de investigación adicionales y hemos aportado recomendaciones técnicas extensas”.

“No entendemos por qué la Fiscalía ha elegido este momento para distorsionar nuestras declaraciones respecto de nuestras propias investigaciones precisamente cuando más evidencia ha emergido desde nuestras fuentes que documentan los ataques a la sociedad civil en México”.

Fin de los comentarios en Twitter.

Y según la FGR, señaló que la organización de seguridad digital “no realizó un análisis técnico forense o pericial de los equipos de teléfonos celulares” y que “no tiene evidencia de que una agencia gubernamental mexicana instalara el malware Pegasus en ningún dispositivo”.

Citizen Lab, por medio de su director, expresó todo lo contrario. Sin duda que AMLO y su equipo están utilizando políticamente una acción transparente de gobiernos pasados, que ahora tratan de desvirtuar y generar la impresión de que eran “espiados”. ¿Espiados para qué? Le dejaron al gobierno de la 4T toda la documentación en los archivos de gobierno, además la empresa ha brindado asesoría a la FGR, para que se informe bien. Pero no, Alejando Gertz Manero fue de comunicativo (chismoso) con AMLO para que sacara “raja política” del asunto contractual. Y el “fiscal” de la UIF se fue aún más allá, habla de empresas fachada con las que contrataron y desviaron miles de millones de pesos.

Derivado de la desinformación que ha difundido AMLO y compañía, el director de Citizen Lab asegura que la FGR utiliza fragmentos sacados de contexto de su propia documentación, para “sugerir, insinuar engañosamente” (como acostumbran en la 4T) que, derivado de las “investigaciones” de los años 2017 a 2019, supuestamente no encontraron evidencia de ataques con pegasus en México. Todo lo contrario, Ronadl J. Deibert asegura que sí hubo innumerables ataques de malwares.

Deibert también dijo: “Leemos estas declaraciones con perplejidad y sorpresa. Le recordamos a la Fiscalía que nuestra investigación identificó intentos de infección con el malware Pegasus a través de mensajes de texto, para lo cual recolectamos y verificamos un gran número de mensajes, al menos, 25 individuos en México”. Precisamente son los 25 teléfonos digitales a los que se refirió AMLO en su mentirosa mañanera. De paso “calentó” a periodistas, utilizándolos como balcos de que fueron “espiados”, por el gobierno de Peña, cuando que la información versa sobre ataques de malwares.

Dos versiones diametralmente distintas. ¡Creo a la empresa Citizen Lab! Simple, ellos son los expertos contratados y no van a permitir la campaña de desprestigio que acostumbra AMLO.

AMLO pretende incitar y molestar a esas 25 personas que recibieron los mensajes (ya lo están), entre los que se encuentran el mismo López, parte de su equipo de campaña, periodistas, abogados, senadores, coordinadores de salud pública, miembros de organizaciones anticorrupción e investigadores internacionales. Las acciones no fueron para “espiarlos”, como dijo el mentiroso presidente, lo desmiente Deibert.

Escribió en Twitter Ronald J. Deibert: “No entendemos por qué la Fiscalía ha elegido este momento para distorsionar nuestras declaraciones respecto de nuestras propias investigaciones, precisamente cuando más evidencia ha emergido desde otras fuentes que documentan los ataques a la sociedad civil en México”.

Conclusión. Es muy clara la dañada intención de AMLO y sus “sabuesos”. Está en periodo de campaña su consulta popular, la que se le viene abajo por impopular; así que López desea cautivar a sus seguidores. ¿Quiénes son los malos para el presidente? Precisamente dos de aquellos a los que quiere acusar, pero no le alcanza para ello. Evidentemente se trata de un acto malicioso de campaña. ¡AMLO es un verdadero malware!

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