El exgobernador del estado, Francisco Domínguez —Pancho para todos—, es un gran activo político del PAN estatal, guste o no guste su estilo, cuestionado o no por su forma de gobernar y de hacer política; Pancho las trae, tiene una lectura clara de la grilla en la entidad.

Pancho le apuesta a que la dirigencia nacional no meta mano en la selección de candidatos en Querétaro, que eso se quede entre el panismo, los dirigentes reales del PAN en la entidad: Mauricio Kuri, Pancho Domínguez y otros más.

Tiene claridad de que debe ser así; de otra manera, si la dirigencia nacional mete mano, la elección está más que perdida. Por eso también ha dicho que lo han buscado de Movimiento Ciudadano —partido que ya tiene en su poder—, del Verde —parece que también es suyo— y de Morena (por lo menos una parte de Morena lo conoce: Mauricio Ruiz, Luis Humberto Fernández, Chema Tapia, Celia Maya, Shinue Piedragil, entre otros muchos).

Pancho trabaja para que Gilberto Herrera Ruiz no sea el candidato de Morena; y tampoco lo sería de MC ni del Verde, lo quiere mandar de independiente.

Sabe perfectamente que la oposición, el PAN, en el ámbito nacional está desaparecida. Un partido sin narrativa ni propuesta, repitiendo lo mismo desde hace 6 años, en su peor etapa político-electoral; desde 2018 ha perdido casi todas las elecciones: Senado, diputados federales, gubernaturas; bueno, hasta Yucatán, que era la que más presumían por sus logros y paz social con Mauricio Vila, no Kuri, perdieron.

Del Senado solo ganaron Querétaro y Aguascalientes.

Lectura aparentemente fácil la de Pancho, que en la pasada elección local advirtió un mes antes de la votación que su partido perdería por lo menos tres diputaciones federales, muchas locales y presidencias municipales. Y sí, así fue: el PAN perdió más de la mitad de las posiciones locales de elección.

Ahora, desde inicios del año, cada que puede, se hace presente con su narrativa que pone al temblar al PAN y que le da confianza a la oposición de un triunfo en el 27. Pero nada de eso, Pancho lanza el petate del muerto.

El exgobernador, un día sí y otro también, declara que los principales contendientes dentro del PAN para la gubernatura en 2027, según sus palabras, son: Luis Bernardo Nava Guerrero, Felipe Fernando Macías, Agustín Dorantes y Marco del Prete Tercero. No incluye a ninguna mujer porque sabe que en el PAN va a ser candidato.

Pero no olvida quién es el primer panista y siempre dice que “la decisión final recaerá en el actual gobernador, Mauricio Kuri”, como si no se supiera que él, Pancho, es el principal operador de Kuri, aparte de ser muy amigos, una relación que va más allá de una simple amistad, una relación de grupo político-económico.

¿Un Pancho fuera del PAN? No es que presione, pero está avisando que si la decisión no la toman los panistas de Querétaro y mete la mano el nacional, él y un gran grupo de panistas y no panistas migrarán a diferentes partidos: a Morena, al Verde —que ya se frota las manos— y a Movimiento Ciudadano, donde Pancho ya tiene control.

Claro, siempre se cura en salud y deja en claro que “no voy a aspirar a nada, lo digo clarito; si hay una pluri, que se la den a una nueva generación” (dicen que a la generación a la que pertenece su hijo, hay que ver).

Pancho Domínguez siempre lanza críticas hacia la situación nacional del PAN nacional, pero llama la atención que nunca mencione sobre el partido en Querétaro.

Porque tiene muy claro que la dirigencia estatal actual, igual que la anterior, solo son adorno, están para cumplir el protocolo, pero en realidad estas dirigencias nada deciden; la dirigencia estatal del PAN, igual que la nacional, no dirigen a nadie, porque nadie les hace caso.

El activismo de Pancho Domínguez pinta un panorama interesante para el PAN en Querétaro, que más que nunca requiere de unidad para enfrentar la elección del 27 y salir victorioso.

Pancho sabe que el PAN, para ganar, requiere un partido fuerte con un candidato de unidad; porque la marca Morena está también fuerte. Y sabe que la elección dependerá del candidato y del partido, no solo del partido, como tal vez sí sueñen con eso en el lado guinda.

Pancho sabe de la debilidad del PAN, pero también de su fortaleza; por eso se atreve a repetir a cada rato quiénes son los “gallos” azules para el 27, y no descarte que de esos 4 que menciona, uno sea candidato a gobernador y otro a presidente municipal de Querétaro.

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