Cuatro años 7 meses no han sido suficientes para el presidente López Obrador para demostrar su falaz discurso, probando con creces su ignorancia y arrogancia. Diariamente disfruta de ello, utiliza la tribuna para que no haya duda.
En su conferencia de este día, de frente a su rabiosa frustración por el desechamiento de sus iniciativas en materia electoral, declaradas inconstitucionales por violación flagrante al proceso para crear leyes; ellos mismos se trompican con sus propias trampas y caen al vacío. AMLO, como suele hacerlo, culpa a los ministros de sus tropelías.
El presidente bien pudo vetar sus iniciativas por el atropellamiento de sus iniciativas; no, le resultó más fácil promulgar y publicar el quebranto a sus propuestas legislativas. Él arrogante cavó, echó tierra y sepultó su torpe e ignorante actitud. Los ministros solo corrigieron los vicios cometidos por legisladores y el mismo titular del Poder Ejecutivo Federal. Así que, solo le quedan como “argumentos” los vituperios, calumnias, amenazas y mentiras para defender su obscuro autoritarismo.
AMLO afirmó que la decisión de la SCJN, al haber desechado en su totalidad sus reformas en materia electoral, se entromete en las atribuciones de los poderes; de tal suerte que se le ocurrió pedir al Consejo de la Judicatura que investigue si hubo ejercicio indebido de funciones. Así de inepto, ignorante y sucio el presidente López. ¿Ejercicio indebido de funciones? No fue simple desliz, no, la idea es desorientar, mentir, acendrar el encono que ha generado entre los grupos de sus irreflexivos fanáticos. “Fuenteovejuna”.
En sus ironías mañaneras, la retórica de siempre, dijo que la decisión de la Corte beneficia a lo que llamó "una minoría corrupta". Por supuesto no tiene manera de demostrar sus mentiras. La SCJN, simplemente cumplió con su obligación constitucional, artículo 105 constitucional, en materia de inconstitucionalidad. Ese es el verdadero ejercicio del equilibrio de Poderes. Todos deben ceñir sus actos a la Constitución y leyes que de ella emanan. Atribuciones que no le agradan a López Obrador, la Corte limita el ejercicio arbitrario y abusivo de su poder.
Acorde a su escasa preparación constitucional, para no afirmar que es nula, como a su enorme mala fe y acción compulsiva de mentir, también dijo: "Ellos están en una actitud de intromisión en las facultades del Poder Legislativo. Lo que hicieron ayer fue corregirle la plana a otro Poder, es como si el Poder Legislativo decidiera enjuiciar a jueces, a magistrados, a ministros corruptos”. El neófito olvidó que el Poder Legislativo sí puede enjuiciar, tiene la facultad del juicio político. Lo que no tienen para ello son los votos. De lo contrario ya lo hubieran hecho. La mitomanía para desorientar a sus huestes.
También diría: "Yo interpreto esto más que nada como una actitud política, de protección, de defensa de los intereses de una minoría rapaz y corrupta". Interpretación presidencial tendenciosa y corrupta. Además de extrema ignorancia. No cabe duda que son sus enemigos, practica lo mismo diariamente. AMLO está urgido permanentemente de enemigos inventados para entretenerse; esa es su política; se olvida de gobernar; su única función, realizar una buena administración pública y no la cumple.
De risa loca. Aseguró que los ministros violan la Constitución al mantener salarios y prestaciones, pese a que él impulsó una reforma constitucional para que ningún funcionario perciba más qué él. Por enésima ocasión “borda sus chambritas”, esperando que alguien se las compre.
La locura del poder. En su locuaz perorata dijo que, pese a su desencuentro con los ministros y el Poder Judicial, inventado por él mismo, aseguró que “no piensa disolver, por Decreto, a la Corte, como lo hizo Ernesto Zedillo, podrían calificarlo de dictador. Claro que es dictador. Otra más, ignora que “pollino” que no tiene esa facultad constitucional, requiere el apoyo calificado del Congreso. Engañabobos. Si lo hiciera va a la cárcel, estaría promoviendo un golpe de Estado. Seguramente se le vino a la mente lo que han hecho algunos de sus homólogos del sur del Continente; hoy sufren las consecuencias: la destitución y la cárcel. Y las innecesarias revueltas sociales, la desestabilización política y económica. Es “burro”, pero no tonto, solo amenazas con balas de salva.
AMLO formula las insulsas preguntas y él mismo se responde: "Dirían “se trata de una dictadura, ya ven, teníamos razón, es una dictadura. No, nosotros queremos hacer realidad una auténtica democracia". Un presidente sin quehacer. Rotundamente se equivocó, en su momento, Enrique Peña Nieto. Se me vino a la mente, cuando en una plática que sostuvo con jóvenes les dijo: “Ningún presidente se despierta pensando cómo joder a México”. Garrafal equivocación de Peña. AMLO se levanta todas las mañanas buscando la manera de cómo joder a los mexicanos, perverso y obsesivo pensamiento para afianzarse del poder que se le escapa a borbotones con el paso del tiempo.
El maniaco continuó con los insultos y mentiras, arrogante posición de la extrema ignorancia y mala fe que le caracteriza.
23
Jun 23
Twittear
#Economía
Danos tus comentarios