Una vez más le dan “palo” a AMLO por la pretendida intromisión en problemas de otros países. Monta en cólera como es su costumbre; trasciende su molestia y critica a quienes no aceptaron su “plan de paz” entre Rusia y Ucrania, argumentando que son intereses de élite y sectarismos. Es agresivo el supuesto pacifista.

Mientras en México pugna por mantener a las Fuerzas Armadas en las calles más allá de su periodo constitucional, para mantener la “paz” que no ha logrado durante su gobierno que llega a los 4 años. Contradictorio con todo lo que hace y dice.

La “virtud, lo fuerte” de AMLO es promover la división, y bien que ha logrado su misión impulsando el clasismo, confrontar a las clases sociales y romper con los grupos políticos para afianzar su poder. ¿Cómo se atreve a promover la paz allende las fronteras de México, cuando en su país incita a la violencia?

Llama politiqueros a quienes no respaldan su propuesta de extender la presencia militar en las calles, por medio de una iniciativa presentada por el PRI en la Cámara de Diputados, pero impulsada desde la Presidencia de la República. ¿Por qué debe interesarle a López Obrador que las Fuerzas Armadas continúen patrullando las calles después de su mandato? No hay razón lógica ni estratégica. ¿Será para que le cuiden las espaldas cuando deje el poder? Justo es reconocer que el presidente ha cometido un sinnúmero de delitos.

Habiendo cruzado la aduana en la Cámara de Diputados la iniciativa del Primor, Ricardo Monreal, coordinador de la bancada de Morena, asegura que no han alcanzado los consensos para lograr la mayoría calificada en la Cámara de Senadores y sea aprobada la minuta proyecto de Decreto, la cual también es impulsada por el político y general que encabeza la Secretaría de la Defensa Nacional, quien ahora llama traidores a los críticos de la 4T; califica de traidores a quienes no piensan como los cuatroteístas. Total, solo ellos son patriotas.

La inocua iniciativa de Primor solo es otro distractor y punta de lanza para dividir la alianza electoral “Va por México” y descongelar la “moratoria constitucional”. Por eso el enojo de AMLO si no consigue el propósito de prorrogar la estancia de las calles militarizadas de todo México, reformando el artículo Quinto Transitorio de la Constitución, cuando fue adecuada para la creación de la Guardia Nacional.

López Obrador ha logrado su objetivo. PAN y PRD no quieren saber nada del dirigente nacional del PRI, a consecuencia de la traición. Otros pugnan por romper con los tricolores; craso error, eso es lo que quiere el perverso del presidente de la República.

El exgobernador de Coahuila y coordinador de la bancada del PRI en la Cámara de Diputados aseguró que es muy “mezquino politizar la seguridad pública”, cuando que ellos son precisamente los que han utilizado como “moneda de cambio”, obsequiaron a López Obrador el capricho de dejar a las Fuerzas Armadas, más allá de su sexenio. Lo peor, que la Guardia Nacional, institución de naturaleza civil, sea controlada por las personas que portan el uniforme verde olivo. ¡Son cínicos los políticos!

Para todos ha quedado claro que el dirigente nacional del PRI politizó, al igual que AMLO, y usó el tema de la seguridad pública como permuta para que los mastines de López dejaran de perseguir a Alejandro Moreno y que sus compañeros de Morena no cumplieran con la amenaza de desaforarlo y entregarlo a las autoridades civiles para ser procesado por diversos delitos.

Ellos han politizado el tema de la seguridad pública, por eso tremendo fracaso. A los especialistas en la materia los han mantenido alejados. En los 4 años del gobierno de la 4T, primero un político a cargo de la seguridad pública no pudo y se fue de gobernador; luego AMLO nombra una periodista a cargo de la seguridad pública, hizo el ridículo y no pudo resolver nada; ahora es la Secretaría de la Defensa Nacional la responsable de la seguridad pública, cuando que en tres sexenios no ha dado el resultado esperado, menos ahora que tienen la orden de no disparar a los delincuentes; estos son personas, son pueblo y hay que protegerlos, según la teoría de los “abrazos y no balazos”.

El ridículo de Rubén Moreira, pedir no politizar la seguridad púbica, cuando ellos no han sido capaces de contratar expertos en la materia para que atiendan y resuelvan el problema de la tremenda inseguridad que vive el país, como nunca antes. Ellos han politizado la seguridad pública. ¡Todos son un fracaso!

AMLO prometió resolver el problema de la inseguridad pública en los primeros 6 meses de su gobierno, no pudo; lo amplió a un año, tampoco pudo; lo extendió a 2 años y nada. No conforme con incumplir y destruir las bases del sistema de la seguridad pública, los legisladores le aprueban el uso constitucional de las Fuerzas Armadas durante todo su mandato para el mismo propósito; llevan 4 años y no pueden. Al darse cuenta que no resolverá el problema de la inseguridad, el plazo lo pretenden ampliar a un sexenio más. Buen pretexto para entretener y no resolver de fondo el problema. Así son los políticos: mentirosos e incapaces.

---