El posteo de una fotografía del diputado federal del PAN, Felifer Macías –despejando la mente, dice él–, donde se ve en actividades contaminantes y abusivas que, bajo la etiqueta de “eventos ecoturísticos”, deterioran el río Extoraz y dañan la Reserva de la Biosfera Sierra Gorda (RBSG), así como zonas aledañas de la región del semidesierto, nos da pie a reflexionar sobre dos cosas:
Primero, la irresponsable actitud de los políticos, en este caso de Felifer, que en su cuatrimoto se exhibe, cuando su “trabajo” es crear, generar, proponer, iniciativas de ley para hacer un país con mayor calidad de vida.
Pero no, justo hace lo que todos esperan de los diputados: nada, solo desprestigiar más un poder que de por sí es el más reprobado por los mexicanos: el Legislativo.
El otro punto tiene que ver con el cuidado del medio ambiente, en este caso con lo que sucede en la Sierra Gorda de Querétaro, que ha sido abordada por todos lados: turismo dizque ecológico como los ruteros, y por depredadores.
La Reserva de la Biosfera de la Sierra Gorda es un área natural protegida en el centro de México, ubicada en el noreste del estado de Querétaro, con una extensión de 383 mil 567 hectáreas enclavadas en la Sierra Madre oriental.
La biodiversidad es su característica, ya que ahí se encuentran asentados 15 microclimas, más de mil 800 especies de plantas, 124 de hongos y 550 especies de vertebrados; 2 mil 308 especies de plantas vasculares, 131 especies de mamíferos, así como 800 especies de mariposas.
Sin embargo, hay un abuso socio ambiental que tiene que ver con el tránsito irrestricto de vehículos recreativos (cuatrimotos, jeeps, racers, etc.), que sin regulación alguna han convertido al semidesierto queretano y al río Extoraz en una pista.
Lo que constituye, primero, en un riesgo para los habitantes de sus comunidades por la velocidad con que circulan los vehículos, el no importar hora para hacerlo, incluso afectando cultivos y terrenos privados ribereños, y desde luego, los severos impactos que ello está teniendo en la integridad ecológica del río Extoraz.
Ello, tanto por grupos de aficionados a dicha actividad como por empresas que buscan promocionar a sus vehículos, como por mal llamados eventos ecoturísticos.
La problemática es mayor, porque esas actividades no aportan derrama positiva económica alguna. No solo está dañando el polígono de la RBSG, sino que comienza a mostrar focos rojos también en el municipio de Landa de Matamoros, violentando el estado de derecho al no contar con ningún permiso de la autoridad ambiental ni de los propietarios privados y ejidales.
Además que, derivado del mismo tipo de “eventos”, está por replicarse el daño en los ecosistemas de Cadereyta de Montes y Tolimán.
Muchos han levantado la voz de alarma, y no son solo los habitantes de la Sierra Gorda, que se quejan constantemente de la basura, la contaminación que dejan en los ríos, bosques, por todos lados.
No. Por ejemplo, la rectora de la Universidad Autónoma de Querétaro ha levantado la voz y ha solicitado de manera oficial en un documento que entregó al gobierno del estado reglamentar y cuidar la biosfera de la Sierra Gorda, porque es patrimonio de la humanidad.
La rectora Teresa García Gasca dijo que “es por tan lamentable situación que me permito dirigirme a usted y que con el concurso de las dependencias en la materia finalmente se ponga orden y regule tan abusiva y dañina actividad”, escribió al gobernador al referirse a las actividades “ecoturísticas” que ya describimos.
La rectora de la máxima casa de estudios en la entidad señaló la necesidad de establecer un grupo de trabajo multisectorial que incluya a los habitantes ribereños para el ordenamiento espacial y temporal de estas actividades.
Este oficio se dirigió al gobernador del estado de Querétaro con copia a otras autoridades competentes como la Comisión Nacional del Agua (Conagua), la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp), la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa), así como la Secretaría de Desarrollo Sustentable (Sedesu) y la Secretaría de Turismo del gobierno estatal.
A ver qué hacen.
Mientras que ambientalistas, activistas en defensa de la biosfera de la Sierra Gorda, ya demandaron al diputado federal; y aunque él crea que es un ataque por su actividad política, que esto le dará publicidad gratis, no es así.
Realmente es una demanda a su irresponsabilidad, y es verdad que no es el único que organiza los eventos, pero es el que hizo visible el problema que representan estas actividades para el medio ambiente en la Sierra Gorda, porque esta actividad viene a acrecentar el problema que representan los basureros clandestinos, y la tala de árboles, también clandestina.
Y bueno, las autoridades federales, estatales y municipales, complacientes con estas tres problemáticas: ecoturismo, basureros clandestinos y tala clandestina, solo miran complacientes cómo se destruye a la Sierra Gorda.
24
Mar 22
Twittear
Me gustaría escribir como si fuera realidad en vez de utopía, que el acoso sex...
Mientras que algunos alcaldes como Roberto Sosa, de Corregidora, se auto reconoc...
La entidad tiene un problema que no se ve pero se siente, las desapariciones en ...
La llegada de la Primavera es festejada en muchas y diferentes formas por todos;...
Danos tus comentarios