Lo adelanté en una de mis Columnas: problemas en los organismos electorales.

AMLO incide en el funcionamiento de dichos organismos. Su idea, cooptarlos completamente, hace el sucio trabajo en su calidad de presidente. Hipócritamente juega como opositor.

El presidente desestabiliza a los organismos electorales y culpa a la oposición. Mientras tanto, manipula a los organismos electorales impulsando desde las entrañas de los organismos a sus colaboradores. Simula la desconfianza, buscando afianzar el control de dichos organismos.

El INE, controlado por la señora Guadalupe Taddei, impuesta por los legisladores morenistas; misma que, al protestar el cargo, levantó el brazo izquierdo en señal clara de su pertenencia. AMLO festejó su arribo. Sin embargo, 8 consejeros le han impedido manipular a su antojo los destinos del organismo electoral.

El viernes pasado esos 8 consejeros boicotearon la sesión, dejando a Taddei sin quorum. Por primera vez en la historia del INE tuvieron que suspender la sesión. Fue al día siguiente cuando continuaron la reunión. En ella condicionaron a la señora Taddei a nombrar, bajo consenso, al personal que no ha podido ocupar los cargos operativos en el INE en 8 largos meses.

La mayoría de consejeros impusieron a la presidenta diversas obligaciones para alcanzar el consenso, al menos de 8 consejeros para nombrar a los funcionarios; las condiciones, que todas las propuestas recaigan en funcionarios con carrera profesional en materia electoral, o sea, que estén ligados al INE y no sea gente externa, sin conocimiento, sin experiencia, improvisados y con inclinaciones políticas. Ocho meses y la señora Taddei se la lleva con nombramientos que denominan “encargadurías”. Simples encargados del despacho, gente ligada a la presidenta, no al instituto, sin experiencia frente a las mayores elecciones de la historia.

Un verdadero peligro para la viabilidad del proceso electoral y las elecciones del 2 de junio de 2024.

En la Sala Superior del TEPJF, derrocaron al presidente Reyes Rodríguez, quien actuó de manera independiente y sin ligas con los cuatroteístas, imponiendo a la magistrada Mónica Aralí Soto Fregoso, incondicional de Morena, con apenas 3 votos de 7.

Evidente que las presiones del presidente han dado resultado en su favor. Con el objeto de confundir a la opinión pública, dice desconfiar de las autoridades electorales, cuando que, en la práctica ha ido avanzando su labor de zapa. Disimula su perversidad. Seguramente AMLO quisiera el control absoluto de ambos organismos electorales y tal vez ni así aceptaría tener el control de las instituciones.

Mientras tanto, la oposición guarda silencio frente al claro asalto de los organismos electorales por parte del gobierno amloista.

AMLO, en su calidad de presidente de la República, es el mayor activista político de la historia que pretende acabar con la democracia en México para imponer una clara dictadura. También impulsa electoralmente a su candidata con la finalidad de dar continuad a sus planes absolutistas. El presidente, principal actor en campaña político-electoral, dirige y manipula a su candidata.

La candidata del presidente, sin ideas, sin propuestas sin innovaciones. El discurso de la “marioneta” del presidente, basado en un “segundo piso”. La retórica se fundamenta en dar continuidad a la transformación; discursos plagados de mentiras, al igual que lo hizo el mismo López Obrador; por ejemplo, que los “neoliberales” quisieron terminar con la educación pública para convertirla en educación privada. Eso jamás sucedió así, nunca un gobierno anterior propuso eliminar la educación pública, por el contrario, siempre fue fortalecida la educación pública gratuita; un claro ejemplo fueron las escuelas de tiempo completo, mismas que el gobierno de la transformación eliminó. Frente a la cauda de mentiras, la oposición guarda silencio.

El engaño, herramienta de discurso político que ha empleado el presidente López desde siempre.

De ahí los avancen en controlar a los organismos electorales para someterlos a su tutela; por ello mediáticamente envía mensajes tergiversados para engañar, afirmando que desconfía de ellos, cuando la realidad es que ha logrado un avance importante en el control.

No pudo hacerlo mediante reformas electorales, lo ha hecho cooptado a las personas que él y sus huestes pueden manipular.

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