De acuerdo con el proyecto del Decreto Egresos para el año electoral, los legisladores morenistas y aliados harán recortes presupuestales a instituciones sostén de nuestra democracia. A otras, sin embargo, les inyectan más dinero a “fondo perdido”. Todo para el vencedor.

Al PJF le quitan, además de los dineros de los fideicomisos (se quedarán con las ganas), 5 mil 697 millones 93 mil pesos. Acto criminal de los legisladores oficialistas. Todo por seguir intentando doblegar al poder público responsable de impartir justicia. Aunque le vuelvan a “rasurar” el presupuesto, no conseguirán su objetivo. El Gobierno de la República pretende debilitar la justicia “matándola de inanición presupuestaria”. No lo conseguirá.

El bloque morenista, constitucional y jurídicamente perderá el juicio de inconstitucionalidad que presentarán sus contrarios, o sea, la oposición. También perderá los juicios de amparo que han presentado cientos de empleados del Poder Judicial de la Federación. Pareciera una disputa, aunque no lo es por parte del Poder Judicial de la Federación; solo se defienden de las embestidas de sus homólogos (los otros dos poderes).

También van en contra del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, al que le rasuran, sin mayor justificación, 761.16 millones de pesos. Un dineral para dirimir controversias electorales. ¿Por qué debilitar al sistema de justicia electoral en proceso electoral? ¿Alguna razón para ello? No, simplemente a los legisladores se les hace fácil quitar dinero a instituciones sensibles de nuestro sistema democrático para trasladarlo al eje central que los controla: el Poder Ejecutivo. Debilitan el sistema de controversias, lo cual fortalece al partido en el poder.

5 mil 003.20 millones de pesos es el recorte para el INE. Tampoco respetaron a la comadre Guadalupe Taddei, quien se quejó del abuso. La señora Taddei advierte riesgos a la democracia mexicana por el recorte. En el proceso electoral más importante de la historia, por el número de elecciones que se llevarán a cabo el próximo año. ¿Por qué quitarle más de 5 mil millones de pesos? No hay respuesta ni justificación de la bancada morenista, simplemente cumple con la instrucción de “rebanar” miles de millones de pesos para reasignarlos al Poder Ejecutivo Federal. El INE tendrá que rehacer su presupuesto.

No podía faltar el odiado INAI. Al instituto le reducen 71.04 millones de pesos. Al gobierno federal, con el apoyo de la bancada de Morena y aliados, no le agrada eso de la transparencia y rendición de cuentas. Una razón más que importante para la decisión que tomarán (seguramente) en esta semana sin razones que justifiquen el recorte al presupuesto. No omito comentar que el gobierno busca romper y destruir el monopolio de la información confidencial de los gobernados. AMLO gusta de exhibir datos prohibidos por la Constitución. Los comisionados sesionan con la ausencia de tres de ellos a falta de nombramientos que debe dar la Cámara de Senadores. Gracias a la SCJN, funcionan legalmente con 4 de 7 hasta que la bancada morenista se digne a nombrar a los faltantes. AMLO se los ha prohibido. De continuar con esta inercia destructiva de instituciones que han fortalecido la democracia y derechos de los mexicanos, el sexenio terminará mal, muy mal. Y así la candidata del presidente quiere continuar con la “transformación” que se traduce en destrucción de instituciones.

289.39 millones menos a la Auditoría Superior de la Federación. Una más de las afectadas. Impiden que puedan auditar a más instituciones gubernamentales, menos presupuesto, menos auditorías. Con eso de Segalmex y la desaparición de más de 15 mil millones de pesos, les urge que la ASF deje de auditar. AMLO propone concentrar más y más poder en el Poder Ejecutivo Federal, con la dañada intención de evitar que auditen en lo posible los fraudes en Dos Bocas, el Tren Maya, el AIFA; en todas estas obras los costos se han elevado al doble y al triple de lo presupuestado, y en año electoral los recursos públicos se desvían para campañas; ello ha quedado probado. ¿Recuerdan el regaño de AMLO al auditor superior por haber estimado que el daño patrimonial por la destrucción de la obra del Aeropuerto Internacional de Texcoco ascendió a poco más de 300 mil millones de pesos? Esa es otra de tantas razones de la bancada morenista para quitarle dinero a la ASF y no audite más. El insano propósito: reducir el margen de auditorías.

También se verán perjudicados los estados y municipios. 4 mil 807 millones 36 mil pesos que no serán trasladados a los estados en la partida correspondiente a Participaciones a Entidades Federativas y Municipios. Más recortes. Esta vez a la partida presupuestal denominada Aportaciones Federales a Estados y Municipios, en la cual no trasladarán a esas entidades mil 492 millones 41 mil pesos. ¿Quién se queda con estos dineros? Tiene usted razón: el Poder Ejecutivo Federal. El centralismo asfixiante de la 4T.

Otras áreas también serán “rasuradas” y el dinero se concentra en el Poder Ejecutivo. El gobierno de AMLO ha sido privilegiado; año con año su presupuesto creció. Para este último y de elecciones, el presupuesto general rebasa los 9 billones de pesos. ¡Exorbitante cantidad! La bancada morenista y aliados hacen crecer la deuda, esta vez en 2 millones de millones que deberemos pagar los mexicanos de hoy y las nuevas generaciones.

Por cierto, nada para los guerrerenses afectados por el huracán Otis. Al menos hasta hoy no hay nada.

Por eso AMLO está pidiendo a la iniciativa privada que ayude a los miles de damnificados. Anda tan mal el gobierno federal que de 81 municipios que conforman el estado de Guerrero, la responsable de la Coordinación de Protección Civil había emitido la Declaratoria de Desastre Natural para 47 municipios; pero el presidente la obligó para que corrigiera, y de 47, simplemente bajó a 2, Acapulco de Juárez y Coyuca de Benítez. Curiosamente, la “aclaratoria” no la firmó la titular de Protección Civil, la señora estaba ausente, según la publicación del Diario Oficial de la Federación. No es posible que la señora se haya equivocado con 45 municipios.

Claro, el gasto será mucho menos para los guerrerenses por parte del gobierno federal; por ello, insisto, pide el auxilio a la sociedad civil y a los empresarios, de tal manera que AMLO así no desvía dinero no previsto y conserva su presupuesto intacto. ¡Ah, bárbaro! Y según el presidente, destinará 61 mil 613 millones de pesos para aliviar el desastre. Nadie sabe de dónde sacará ese dinero si desapareció el Fonden. ¿Será esa la razón por la cual pide apoyo de los empresarios y sociedad civil? Claro, a río revuelto, ganancia de pescadores.

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