Mucho se han desgastado los militantes cuatroteístas, empezando por AMLO, en insistir que el pueblo manda ¿Por qué entonces no hacen caso a los miles y miles, seguramente millones de ciudadanas y ciudadanos que se expresan y manifiestan clara y abiertamente en contra de la destrucción del Poder Judicial?

Rechazo total a la iniciativa de reforma que deforma al sistema de impartición de justicia nacional y en su momento en todos los estados que componen la República Mexicana.

El oficialismo no tiene el respaldo popular para la aprobación legislativa. Han empleado métodos literalmente delincuenciales para conseguir votos, que no voluntades, para alcanzar la mayoría calificada tanto en la Cámara de Diputados como en la de Senadores. Voluntades violentadas y viciadas de machas y muchos legisladores que cobardemente guardan silencio y no denuncian.

Han empleado amenazas y persecución penal para conseguir y doblegar a los legisladores más vulnerables.

Esos votos de la oposición representan a la sociedad que votó en contra del proyecto de destrucción. Vicios electorales y de voluntad que, en cualquier juicio conducen a la nulidad absoluta del acto, ni siquiera nulidad relativa que pudiera convalidarse.

La casa del senador del padre de Daniel Barreda Pavón, de la bancada de MC, fue rodeada por militares de la Guardia Nacional, custodiada. Nadie sabe las razones del por qué. Mientras que el senador se “desapareció” por días. Algunos aseguraban que estaba detenido en la tierra de Layda Sansores. Pero no, el señor se fue a cobijar en las oficinas del Senado a las faldas del coordinador de Morena. Luego aparece que, de última hora el senador se cambió a la bancada del Verde, como para simular que no lo arrastraron a Morena.

Mientras que Miguel Ángel Yunes Marques argumentó estar enfermo y presentó este mismo día solicitud de licencia, misma que le aprobaron y entró en funciones su padre Miguel Ángel Yunes Linares. En tribuna argumentó que fueron amenazados desde el proceso electoral. Luego arremetió en contra de su coordinador de bancada, Marko Cortés, acusándolo de todo. Yunes reviró las ofensas. Un fracaso entre militantes de los partidos; el suplente no adelantó si votaría en contra o a favor del dictamen, pero fue cobijado y aplaudido por la bancada oficialista. Esta es la respuesta que no quiso adelantar.

Días antes presionaron a los dos únicos senadores del PRD –ya desaparecido legalmente– para adherirse a Morena, y así lo hicieron Araceli Saucedo y J. Sabino Herrera. Senadores que ganaron las elecciones en Michoacán y Tabasco para no respaldar la iniciativa oficialista. Por lo tanto, el pueblo no está de acuerdo con la reforma.

En sesión de Pleno del Senado de este martes, arribaron cientos de manifestantes e interrumpieron el desarrollo de la misma; la “reventaron”. El pueblo se manifiesta en contra de la iniciativa de reforma del presidente.

¿A qué pueblo se han referido los oficialistas y el mismo AMLO cuando afirman que es mandato popular la destrucción del PJF? ¿Acaso hay diferentes pueblos en México, los buenos y los malos? La mentirosa retórica oficial no resiste el análisis ¡El pueblo es el que exige no a la reforma! Pueblo mexicano solo hay uno.

Ha sido un proceso legislativo bañado de trampas, engaños, ilícitos, presiones, compra de voluntades, etcétera, para conseguir mayorías ficticias que no representan al pueblo. No los respalda la voluntad popular. Terca necedad de AMLO para someter al Poder Judicial. A 20 días de dejar su mandato intenta incendiar al país. Esa es la verdadera intención, generar problemas y controlar la impartición de justicia.

La delincuencia organizada en las filas legislativas arribó a la burocracia morenista: al partido oficialista. Acciona y responde cual organización delictiva, escudada en el poder político que le brinda la “autoridad” de la supuesta y tramposa legalidad.

Nunca en una legislatura se habían aplicado métodos delincuenciales para conseguir votos.

El aberrante oficialismo –AMLO– cooptó todas las instituciones que podrían impedir los abusos. Hoy es literalmente imposible. La Fiscalía es un simple satélite del gobierno, no goza de autonomía. La Guardia Nacional bajo el mando de las Fuerzas Armadas, que solo se mueven por orden militar –por aquello de la custodia ilegal de la casa del padre del senador–.

La cauda de ilícitos cometidos podría generar la nulidad absoluta del proceso legislativo.

No confundir con la reforma constitucional. Los atropellos procesales por las prisas para alcanzar las aprobaciones en ambas cámaras, son evidentes; podrían generar la nulidad constitucional del procedimiento, que no del fondo de las reformas. Eso es materia resuelta y no admite discusión.

La SCJN, sin embargo y en su momento, a instancia de parte, pueden intervenir para sentenciar sobre la legalidad o ilegalidad del proceso legislativo; con la aportación de las pruebas, por supuesto. Sobre todo, en materia de juicios de amparo que han interpuesto varias personas –jueces– dado que violan sus derechos humanos y nada ni nadie está sobre protección de los Derechos Humanos que tienen y debe procurar en defensa de la justicia, artículo 1º de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos.

Al concretar el atraco constitucional para reformar la Constitución, se abre otra ventana legal de oportunidad para la presentación de cientos de juicios de amparo, dado que la aplicación de la reforma estaría violentando, insisto, Derechos Humanos, entrando al análisis de fondo sobre la vulneración de los Derechos Humanos por parte de la autoridad.

En síntesis, el pueblo no acepta la reforma constitucional tal y como la planteó AMLO. Iniciativa que solo han estado aprobando sus legisladores.

Porcentualmente, la mayor parte del pueblo no aceptó el supuesto mandato que arguyen como justificación los oficialistas del régimen.

Septiembre, mes de la patria, podría nuevamente surgir otra independencia. Esta vez, liberarnos de las traiciones de los entreguistas del sistema judicial a manos de la delincuencia.

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