De todas las expresiones y acciones que me ha tocado ver en contra del cambio de placas en el estado, la más irrisoria sin duda es el presunto “amparo colectivo”.

Entiendo, empáticamente, que las pulsiones primigenias de los homínidos simpatizantes de Morena siempre los lleven a actuar bajo el prurito de que “la unión hace la fuerza”. En otras palabras, a hacer bola, pues.

Pero en este caso, lo que hicieron estos bellos y belicosos especímenes es exhibir una vez más su incapacidad y su instintiva y violenta forma de hacer política. Eso, sin contar la nula institucionalidad que demuestran; pero bueno, basta de halagos a los multitribales. Le explico.

Resulta que Morena (así dice la convocatoria, aunque la dirigencia diga que son consejeros) invita a promover “amparo colectivo” en contra del cambio de placas, para lo cual solicita a los ciudadanos interesados llevar su INE, pasaporte o cartilla del servicio militar para “firmar el amparo”.

Pero claro, como nada es gratis en política, si quieres, de paso te afilias, total, ya estando ahí. Sin embargo, lo que no dicen los más claros exponentes del lumpen belicoso es que su beligerante acción parte de una falacia, primero, porque el juicio de amparo es un acto personalísimo, es decir, ¡CADA CIUDADANO LO PROMUEVE!, no en bola, no es de juntar firmas como chamacos berrinchudos en busca de remover al prefecto; eso por un lado, y por otro, en su “gran convocatoria” olvidaron solicitar a los inocentes que acudan ante su clan en busca de cobijo el requisito substancial por excelencia para promover el mentado juicio: ¡ACREDITAR QUE TIENEN CARRO REGISTRADO EN EL ESTADO PARA SER SUJETOS OBLIGADOS DEL IMPUESTO!

Ahora bien, esto del amparo es crónica de otra derrota épica en una batalla estéril, de esas que a los morenos les caen como anillo al dedo para “seguir en pie de lucha”, pues verá usted, cuando presenten el amparo, el juez federal se los desechará de plano por incumplir requisitos de procedencia, o en el mejor de los casos, los prevendrá para que aclaren su acción y, obviamente, cuando todo se vaya al carajo por su impericia y laxitud, culparán a su enemigo por excelencia, “la Mafia del poder”, que seguramente compró a la justicia federal. De mí se acuerda.

Pero pensemos positivos y otorguemos el generoso beneficio de la duda. Así que suponiendo que ganen, ¿quién diablos aportará la fianza para sustentar la suspensión? No creo que alguno de los que anduvieron en la bola saque el billete. ¿O sí? Porque en una de esas es “chicle y pega”, pero les sale más caro el “caldo que las albóndigas”.

Se enojan porque se les exhibe y les da por denunciar; pero eso les pasa por mentirosos e ignorantes, así que no den lata y no sean llorones.

¿Y los representantes? Bien, gracias. ¿Y la familia?

Siguiendo con el tema de las quejas, los simpatizantes de Morena deberían empezar a limpiar la casa desde adentro, como dice el presidente, pues sus cinco diputados plurinominales, cuya justificación de existencia es la representación de la fuerza política en la LX Legislatura del Estado, Juan José Jiménez Yáñez, Laura Andrea Tovar Saavedra, Christian Orihuela Gómez, Yasmín Abellán Hernández y Armando Sinecio Leyva, votaron sin reserva alguna la Ley de Ingresos 2022, que incluye el impuesto que ha despertado sus más bajas pasiones y que motiva su protesta.

Dicho sea de paso, la única forma de dar crédito a la “supuesta molestia” partidista, para con estos “virtuosos del ostracismo” (categoría en la que también pueden incluirse los regidores capitalinos Martha Fabiola Larrondo Montes, José Arturo González Córdoba, Ivonne Olascoaga Correa y José Manuel Sánchez Nieto), que votaron a favor y por unanimidad las tablas de valores catastrales, es que Mauricio Ruiz Olaes haga un extrañamiento público para los externos y abra procedimiento sancionador a los que son militantes; de lo contrario, todo es “llamarada de petate” y abono en tierra radioactiva.

Para muestra, el lánguido desconocimiento que lanzó contra el defeño veracruzano que detenta su dirigencia; simplemente le hizo “lo que el viento a Juárez”, pues “El Guti” sigue haciendo su agosto en enero.

Por cierto

Para que no haya dudas y no le cuenten cosas que no son, en el PVEM hay unidad; y muestra de ello fue la reunión que se dio el pasado martes, en la que regidoras, funcionarias y militantes de todo el estado se dieron cita a la convocatoria realizada por la secretaria de la Mujer de ese instituto político, Imelda García Ugalde, para presentar su programa anual sobre capacitación y liderazgo político de las mujeres.

Enhorabuena, y como dicen los clásicos, “chamba mata grilla”.

La quinceañera

Como le adelanté en columnas anteriores, el tema de Cuitláhuac García alcanzará tierras queretanas; para ser más específicos, al dirigente de la organización fantasma “Movimiento por la Transformación”, César Gutiérrez Sánchez, quien en compañía de su madre, Mara Sánchez, pedía moches del 15 por ciento a cambio de gestionar recursos federales a los presidentes municipales del estado de Veracruz, ayudados por el “señor de las ligas” René Bejarano (si usted es muy joven, busque señor de las ligas en YouTube), pues está vigente la carpeta de investigación iniciada por el presidente municipal de Texhuacán, Veracruz, Bernardino Tzanahua Anastasio, luego de que este par de angelitos le bajaron la nada despreciable cantidad de 200 mil pesos por la gestión de un millón 350 mil pesos de partidas federales.

Así que si me lee algún jarocho, ¡en Querétaro está al que andan buscando!

Segob, delegación maldita

Dicen que no hay borracho que trague fuego, y prueba de ello es la reciente manifestación contra el plan de reordenamiento vial el pasado sábado, y en donde se vio muy activo a Joaquín de la Lama, “delegado” en funciones de la Secretaría de Gobernación. Parecía un milagro de año nuevo, pues muy rara vez aparece.

Y es que ese esfuerzo desinteresado, en donde se repartieron cartulinas, se puso una mesita de firmas y hasta cargaron con una botarga, tiene de todo menos una causa ciudadana.

Por un lado, el partido que hoy se pretende adjudicar una inquietud ciudadana, no ha sido capaz de levantar la voz en otras inquietudes, como la falta de medicamentos, el alza en impuestos y la nula inversión de presupuesto federal para obras en Querétaro.

Por otro lado, el delegado parece estar más desesperado por atraer la atención y así ganarse un puesto en el próximo proceso electoral en la entidad. Solamente que no le avisaron que por ahí no va la jugada.

Ahora será momento de cuestionar qué tanta credibilidad puede tener este tipo de marchas, de esas denominadas del club de Tobi. Habrá que esperar el actuar del gobierno federal, pues no es tema para echar al baúl del recuerdo.

Ya cayó un avión ahí, nomás digo.

Lenguas viperinas

Donde están de fiesta es en el “feudo de El Marqués”, pues con todo el rollo de tenencia y predial capitalino, nadie voltea a ver su ley de ingresos, a pesar de que allá se albergan los más grandes parques industriales del estado, tiene alta concentración habitacional y ostenta la zona residencial más exclusiva del estado.

En fin, hablando de ostracismo.

Como siempre, la mejor opinión es la de usted. Y recuerde, no me crea a mí, créale a sus ojos.

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