Al paso de los días y con la guerra de encuestas, se hace sumamente necesario saber quién será ungido como candidato a gobernador del partido del presidente.

Es urgente quitar la especulación de propios y extraños para que la política local fluya de manera correcta, para que senadores oportunistas dejen de pasar charolas y vender plazas, y para evitar que operadores de generación espontánea estén vendiendo ilusiones.

Incluso, es básico para tener mediciones reales, para que las encuestadoras dejen de mezclar chapulines con estadistas y causalidades con casualidades.

Es imperante que el propio ungido se sienta poseedor de la candidatura, pues el tiempo sigue corriendo y es en contra, ya que el primer obstáculo a vencer serán las batallas intestinas que se gestan entre los homínidos tribales, que son incapaces de hacer política y construir en torno a un liderazgo local, pues todos se creen generales y necesarios.

Ilusiones no hacen campañas.

Ríos está desubicado

A quien parece que los años y la derrota no le han servido para madurar es a José Adolfo Ríos García, pues aunque virtualmente está arropado y amarrado con el Partido Verde Ecologista de México, anda picando por todos lados dizque para construir en torno a su persona una “alianza opositora”.

Lo que no dimensiona el ávido actor es que las alianzas las consolidan los presidentes de partido, no los suspirantes, y que no le alcanza para erigirse como el líder opositor que Querétaro espera, dejándolo únicamente como un personaje de desbordada soberbia y desconocimiento de la vida pública. Aún está a tiempo de dejarse ayudar, pero esa es otra historia.

Ansias de novillero…

El cerillo comenzó a quemar

Recordará que la semana pasada decía que quien podría venir a descarrilar el proyecto de Acción Nacional en el estado es precisamente el excandidato presidencial Ricardo Anaya, quien ni tardo ni perezoso, ha comenzado a inflar personajes locales con el afán de encarecer las negociaciones rumbo a las candidaturas venideras.

Tal es el caso del diputado federal Felipe Fernando Macías, a quien está direccionando al Centro Cívico, lo cual sería un error garrafal; pues aparte de que el diputado pocos méritos tiene para hacerse de la candidatura —a diferencia de Luis Nava—, sí tiene mucho material para el golpeteo político, siendo quizá lo que más le pesa haber sido parte del Cabildo mayormente cuestionado en los últimos veinte años en el estado, el de Marcos Aguilar Vega.

A nadie debería sorprender el actuar del “Cerillo”, lleva años así: mentira, traición y negociaciones en lo oscurito. Es lo suyo.

Si me engañas una vez, será tu culpa; si me engañas dos, será culpa mía. (Proverbio árabe).

Más de notarios

En el gremio notarial los ánimos están encendidos, pues muchos cotitulares están conflictuados entre sí. Algunos despachan en lugares diversos a los registrados en la Secretaría de Gobierno, incluso hasta en las cajuelas de sus coches.

Luego no se quejen si salen más escándalos como el del notario 24, a quien por cierto niegan todos, hasta los que disfrutaron de sus mieles en sendos viajes a la “Champions”.

Vaya final de sexenio para la Secretaría de Gobierno.

Lenguas viperinas

Sigue el jaloneo en el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación por el tema de las impugnaciones de los nuevos partidos políticos, pues dicen, las causales de negativa son iguales, al menos en el caso de México Libre y Fuerza Social por México, así que o se van los dos o se quedan los dos. El PES se cuece aparte.

Como siempre, la mejor opinión es la de usted. Y recuerde, no me crea a mí, créale a sus ojos.

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