Andrés López Obrador dejará el gobierno con tres grandes problemas que prometió resolver y, por el contrario, se agravaron en su administración.

Los tres asuntos surgen de la seguridad nacional y la relación con nuestros vecinos estadounidenses.

Primero. Los grupos criminales por las aduanas pasan toda la clase de armamento que les ha permitido incrementar su fuerza y ​​violencia. Armas de grueso calibre capaces de perforar material blindado, incluso derribar helicópteros. El presidente en lugar de responsabilizarse del fracaso, prefiere culpar a los norteamericanos, habiendo ordenado a Marcelo Ebrard que demandara a las armerías en los Estados Unidos, dado que allá comprarán las armas que después traen a México y con causas ellas violencia.

Juicio que perderá México, dado que las compras se realizan en territorio norteamericano y bajo las leyes de aquel país. El problema es la incapacidad en las fronteras y no logran contener la introducción de las armas de fuego. Así es como AMLO pretende eludir la responsabilidad, siempre culpando a otros de su ineptitud.

¿Qué pasa con las armas de fuego que no se fabrican en los EU y sí logran introducirlas a territorio mexicano? ¿Es culpa de las armerías norteamericanas? Por supuesto que no. El gobierno de México tiene que demandar a otros gobiernos, como Alemania o Austria, por citar a otros productores de armas que son adquiridas por los delincuentes en nuestro país. El fracaso que nunca reconocerá a López Obrador.

Miles de armas de fuego con las que han asesinado a más de 160 mil mexicanos y mexicanas durante los 4 años 9 meses. ¿Y los millones de cartuchos que son utilizados para las armas? Otro problema que pasa desapercibido y lo omite el gobierno de la 4T. El presidente ha generado la distracción para que todos volteen hacia otro lado, mientras los delincuentes ya ocupan dos terceras partes del territorio nacional.

Esa ha sido la política pública del gobierno federal, abrazos a los delincuentes o, la terrible amenaza del presidente de López, de acusarlos con sus madres y sus abuelitas, para que regañen a los homicidas, violadores, secuestradores, ladrones, cobradores de piso, extorsionadores, etcétera.Por eso la delincuencia se ha exacerbado, ni la fuerza pública ni las amenazas de los regaños logran contener a los delincuentes.

Segundo. Sobre el fentanilo, opioide sintético 50 veces más potente que la cocaína o 100 veces más fuerte que heroína. AMLO prefiere que su gobierno encarcele a los anestesiólogos, antes que perseguir a los delincuentes que fabrican y trafican la peligrosa droga.

López Obrador, los “pararrayos” de sus propios problemas. También echa culpas a otros y niega que en México se fabrique. Ha responsabilizado a los chinos y estos lo han negado oficialmente.

Los norteamericanos aseguran tener las pruebas suficientes que demuestran la veracidad de fabricación la clandestina del opioide en tierra mexicana.Personal del Ejército Mexicano, ha destruido laboratorios en los que se producen el fentanilo. AMLO sigue negando la realidad.

Además, López justifica que en México no se consuma el fentanilo, que solo lo exportan los delincuentes; los precursores son chinos. Mentira. En la frontera el consumo empieza a ser una realidad. Muchos migrantes estacionados en la frontera con los EUA lo consumen y por supuesto que en México va al alza el consumo dado lo barato que resulta adquirirlo. Un grave problema de salud pública que amenaza con agravar. El gobierno amlosiano dejará serios problemas a su sucesora o sucesor.

Tercero.Qué decir del problema de las millas y millas de migrantes que ingresan libremente a nuestro país. También otro asunto que se grabó con el tiempo. La permisibilidad, la corrupción y los traficantes de personas, sin control. El Instituto Nacional de Migración, un fracaso rotundo. Vamos, los 40 muertos en el incendio en una de las “cárceles” que eran llamados “refugios” para migrantes, revelaron la ineficiencia del Instituto y los problemas que existen en su interior. Había “cárceles” del Instituto por todos lados. Después de la muerte de los 40 migrantes, en custodia del gobierno federal, ordenaron cerrar los “refugios”. Así que los migrantes pululan por doquier, sin control alguno, cada vez son más y más.

Miles de migrantes que se internan a México, dadas las dificultades para llegar a los EUA, deciden quedarse en nuestro país. ¿A qué se dedican y quién los mantiene? Otro problema. Muchos de ellos se utilizan sin recibir seguridad alguna. Otros dedicados a la delincuencia. Muchas mujeres a la prostitución. El gobierno tolera el problema y no lo resuelve, lo agrava. Otro fracaso del gobierno de la #4T.

¡Ah!, pero AMLO prefiere culpar a los EU por no permitirles la entrada a su territorio. Con los 2 migrantes recientemente ahogados en el Rio Bravo, López culpa a las boyas que mandó poner el gobernador de Texas en medio del cauce del río.El presidente responsabiliza a la decisión tomada por el gobernador, consistente en la medida impuesta como contención para el paso de migrantes. Desde allende las fronteras le respondieron: “que asegure la frontera y no permita el tránsito de migrantes”. Así se evita que crucen el río.

Sencilla y contundente respuesta. Una vez más el incapaz de Andrés López culpando a terceros de sus pifias, de sus errores e incapacidades para administrar, mucho menos eficiente para gobernar. En materia política prefiere estarse peleando con todos para distraer, mientras los graves problemas se agudizan. Así lo ha hecho durante su mandato, todo augura que así seguirá.

Negro panorama el que nos espera a los mexicanos en lo que resta de la administracion.

Problema inédito. Mientras tanto, los aberrantes libros de texto para primaria que pretenden ser utilizados en el nuevo ciclo escolar, resultaron otro problema que afectará a los educandos si llegan a sus manos. La Unión Nacional de Padres de Familia, por medio de juicios de amparo, ha logrado jurídicamente contener la entrega masiva del material. ¿Por qué razón cree usted amable lector? ¡Por violaciones al procedimiento para la creación de los libros de texto!

El omiso y rebelde gobierno se resiste y AMLO amenaza con la distribución y entrega, a pesar de la suspensión definitiva que fue otorgada por una jueza de distrito (por eso los odia AMLO) para que no caigan en manos de los menores.La SEP pretende, bajo la autorización de AMLO, el adoctrinamiento marxista, haciendo a un lado el verdadero aprendizaje para una buena educación; en sus páginas se contienen “errores de primaria”, sumado al enfermizo adoctrinamiento socialistoide que se pretende por medio de los nuevos libros. López minimiza la grave y grave problema. Destruir a las siguientes generaciones de la niñez mexicana, ese es el objetivo de la izquierda.

En definitiva, el peor gobierno del siglo pasado y del presente es el de Andrés López Obrador. Las pruebas están a la vista. Nada resuelve, los problemas que prometió solucionar los agravan y genera otros. ¡Urge que López Obrador se vaya!

---